La Estrategia municipal contra la soledad 2020-2030 se presenta en el próximo Pleno del Consejo Municipal, el viernes, 23 de julio, con una misión concreta: contribuir a paliar la soledad no deseada de toda la ciudadanía de Barcelona, desde niños y jóvenes hasta personas mayores, promoviendo relaciones de calidad, sólidas y duraderas y velando por el bienestar de todo el mundo, de acuerdo con los objetivos de desarrollo sostenible de la Agenda 2030.
La Estrategia municipal contra la soledad 2020-2030 está concebida con una visión de largo recorrido. Con un horizonte de diez años, se plantea como una actuación transversal en todos los servicios públicos que, a su vez, promueva y fomente la reflexión y el debate público, experto y académico sobre la soledad.
La soledad no deseada se ha convertido en un problema global de las sociedades actuales, que, además, se ha visto incrementado a raíz de la situación ocasionada por la COVID-19. La soledad, a diferencia del hecho de estar solo, es el sentimiento subjetivo y poco deseado de falta de compañía, que se puede manifestar en personas de todas las edades y por circunstancias diversas.
En este sentido, los datos recogidos en Barcelona a través de la encuesta Òmnibus, realizada en junio del 2020, señalan que el 18,9 % de la población de 16 años y más de la ciudad se siente sola a menudo o a veces. El 26,5 % de los y las jóvenes afirman que se sienten solos a menudo o a veces, un porcentaje superior al de las personas mayores de 65 años, que representa un 18,7 %.
Con la necesidad de visibilizar la soledad y de abordarla de manera multidimensional, desde la prevención hasta la actuación, teniendo en cuenta las diferentes etapas del ciclo de vida y circunstancias de la población, la estrategia pretende tanto ofrecer recursos a las personas que sienten soledad no deseada como promover el fortalecimiento de los vínculos sociales en la ciudad para prevenir la soledad de las personas de cualquier edad, sexo, género y origen.
La Estrategia municipal contra la soledad 2020-2030, presentada como una hoja de ruta flexible para poder adaptarse a los cambios sociales y nuevas realidades, se estructura en 4 grandes líneas que derivan en 25 objetivos concretos:
- Sensibilizar y generar conocimiento sobre el impacto de la soledad en la ciudad y en el bienestar de la ciudadanía.
- Desplegar recursos y servicios para prevenir, detectar y atender las situaciones de soledad.
- Reestructurar la ciudad y sus ámbitos en espacios comunitarios para abordar las situaciones de soledad.
- Adaptar el funcionamiento de la organización municipal a los nuevos retos que plantea la soledad.
Plan de acciones 2020-2024
Junto con la estrategia, el próximo viernes se presentará el Plan de acciones 2020-2024, que incluye 71 nuevas iniciativas, que se suman a los 268 programas y servicios en activo que ya tiene el Ayuntamiento para paliar el sentimiento de soledad no deseada.
Entre estas acciones destacan la puesta en marcha del servicio Vincles+ para llegar a personas más mayores, la redacción de una guía para profesionales de la juventud para ayudarlos a prevenir, detectar y acompañar a los y las adolescentes y jóvenes en esta situación, la organización de un congreso internacional sobre soledad o el impulso del Observatorio de la Soledad de Barcelona.
Una de las propuestas para este otoño es una campaña de comunicación para ayudar a concienciar, desestigmatizar y sensibilizar sobre la soledad, interpelando a toda la ciudadanía para que se convierta en aliada en la lucha contra la soledad en la ciudad, promoviendo el conocimiento sobre el problema, la prevención y la capacidad de todo el mundo para contribuir a fomentar las conexiones entre las personas, con la comunidad y con el entorno.